¿Alguna información? ¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
Belleza

Por qué la Navidad aumenta el riesgo de sufrir un ictus y cómo limitarlo

La Navidad es sin duda una época para disfrutar, pero no a costa de tu salud. Prevenir los riesgos de un ictus depende de decisiones simples pero conscientes

Durante las fiestas navideñas, solemos centrarnos en los momentos felices con nuestros seres queridos. Sin embargo, hay algo más que también aumenta en estas fechas: el riesgo de sufrir un ictus. ¿Por qué ocurre esto justo en la época del año que debería ser la más alegre? Aquí te explicamos las razones y, lo más importante, cómo proteger tu salud mientras disfrutas de las celebraciones.

¿Qué pasa con el cuerpo en Navidad?

El final del año trae consigo cambios drásticos en nuestra rutina diaria. Entre cenas familiares, sobremesas largas y un posible desajuste en nuestras actividades habituales, el cuerpo entra en un estado de sobrecarga. Factores como el estrés, los excesos en comida y bebida, la falta de sueño y las bajas temperaturas son solo algunos de los elementos que ponen en jaque nuestra salud cardiovascular.

En estas fechas, investigaciones han demostrado que hay un repunte significativo de casos de ictus y otras emergencias cardiovasculares, particularmente los días clave como el 25 de diciembre, el 26 y, nuevamente, el 1 de enero.

Estrés navideño: el enemigo silencioso

Aunque Navidad suene a descanso, la realidad es que puede convertirse en una fuente de estrés intenso. La planificación de reuniones, los gastos excesivos y la presión por cumplir expectativas sociales pueden elevar los niveles de cortisol, una hormona que, en exceso, afecta al corazón y los vasos sanguíneos. Esto, acompañado de actividades físicas reducidas, se convierte en una combinación peligrosa.

Además, el estrés puede hacernos ignorar señales claras de alerta. Muchos piensan que un chequeo médico puede esperar hasta enero, pero esta decisión puede ser arriesgada.

Las bajas temperaturas y sus efectos

El frío intenso típico de diciembre impacta directamente en nuestra salud cardiovascular. Las bajas temperaturas provocan que los vasos sanguíneos se contraigan, lo que incrementa la presión arterial. Este esfuerzo extra que debe realizar el corazón para enviar sangre al resto del cuerpo puede ser un disparador para casos de ictus, especialmente en personas con antecedentes de hipertensión.

Si bien este problema afecta a todos, los adultos mayores y aquellos con enfermedades crónicas son los más vulnerables.

La influencia de la comida y la bebida

En Navidad los platos suelen estar cargados de excesos: alimentos ricos en grasas, sal y azúcares, combinados con un alto consumo de alcohol. Esto no solo contribuye al aumento de peso, sino también a un incremento en los niveles de colesterol y presión arterial, ambos factores asociados directamente con el riesgo de ictus.

El consumo excesivo de alcohol es especialmente crítico, ya que puede generar alteraciones en el ritmo del corazón, también conocidas como arritmias, y aumentar la posibilidad de formación de coágulos.

Cómo reducir el riesgo de ictus en Navidad

A pesar de los desafíos, hay muchas maneras prácticas de disfrutar la Navidad sin poner en peligro tu salud. Aquí te dejamos algunas recomendaciones para que tengas en cuenta:

1. Prioriza tu descanso: Dormir bien es clave para mantener estable la presión arterial. Aunque las fiestas sean emocionantes, asegúrate de respetar tus horarios de sueño.

2. Modera el consumo de alimentos grasos y alcohol: Opta por alimentos saludables como pescado, verduras y frutas. Cocinar las verduras al vapor, por ejemplo, te ayudará a preservar sus nutrientes. Asimismo, reduce la ingesta de bebidas alcohólicas y considera opciones como los mocktails, una alternativa divertida y sin riesgos.

3. Mantente activo aunque haga frío: No abandones tu rutina de actividad física. Incluso un paseo corto después de las comidas puede ser beneficioso para tu salud.

4. Abrígate bien: El frío no solo molesta, también afecta a tu circulación sanguínea. Usa gorros, bufandas, guantes y calcetines gruesos si vas a estar al aire libre.

5. Aprende a decir “no»: Si las obligaciones te desbordan, no temas establecer límites, ya sea en el trabajo o con la familia. Tu salud mental tiene un impacto directo en tu bienestar físico.

No ignores las señales de alerta

Si experimentas dolor intenso en el pecho, mareos, debilidad en un lado del cuerpo o dificultades para hablar, busca atención médica de inmediato, sin importar si es Navidad. No hay una fecha adecuada para cuidar tu salud.

Recuerda: actuar rápido puede salvarte la vida. Un ictus tratado a tiempo reduce significativamente el riesgo de daño irreparable.

Cuidar de ti mismo no significa renunciar a los momentos especiales con tus seres queridos, sino asegurarte de disfrutarlos por muchos años más. Este año, celebra con responsabilidad y convierte tu bienestar en el mejor regalo de todos.

¿Le resultó útil este artículo?

Angélica Ramos

Angélica Ramos es una apasionada de la moda y la salud. Fuera de su carrera profesional, Angélica disfruta de la práctica de yoga, la meditación y la exploración de nuevos lugares y culturas. Su pasión por la moda y la salud continúa impulsándola a innovar y a compartir su mensaje de autenticidad y bienestar en cada oportunidad que tiene.

Publicaciones relacionadas