¿Alguna información? ¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
Estilo de vida

No dejes que el mobbing haga de tu vida un infierno

El entorno laboral puede ser causante de diversos conflictos, pero cuando se torna personal, es posible que no esté relacionado con tu desempeño. Un fenómeno cada vez más visualizado, el mobbing puede tener consecuencias graves para la salud.

¿Qué entendemos por mobbing?

Identificado como actitud de acoso moral o psicológico, es provocada por uno o más personas sobre un trabajador. Tiene como fin hostigar y perturbar mediante una intimidación sistemática. Esta conducta hostil está diseñada para desestabilizar mental y físicamente a las personas.

A diferencia del bullying, el mobbing no incluye violencia física y puede ser ejercido por compañeros, subordinados o jefes (bossing). Si durante 6 meses o más y una vez a la semana, has sufrido hostigamiento no justificado, lo estás padeciendo. Esta situación es fuente de estrés, aislamiento laboral, bajo desempeño, falta de autoestima y más.

Tipos de mobbing

El mobbing puede estar motivado por deseos de poder o control, incapacidad del agresor o envidia. También se le asocia con el síndrome de chivo expiatorio cuando peligra la integridad del grupo o como una táctica empresarial para provocar la baja voluntaria y evitar indemnizaciones.

Además de estas causas, el tipo hostigamiento está catalogado así:

  • Horizontal. El acoso puede venir de un compañero del mismo rango jerárquico y que ejerce un dominio situacional o psicológico.

 

  • Descendente. El conocido bossing es ejercido por un jefe mediante conductas abusivas u hostigadoras para ostentar su poder, hacer saber quién manda o como estrategia empresarial.

 

  • Ascendente. Aquí, uno o más subordinados atacan a su superior por su liderazgo o por ser alguien externo que desplazó a un candidato interno.

Recomendaciones sobre el acoso laboral

Aunque el mobbing puede ser difícil de probar o esté considerado como algo habitual dentro, aún puedes defenderte. Además de tener apoyo familiar y profesional, considera estos consejos:

  • Ante cualquier acoso, defiéndete de manera tranquila y sin recurrir a la violencia.
  • Con notas o grabaciones, registra cualquier incidente para documentar con hechos el hostigamiento.
  • No sientas vergüenza de notificar que estás siendo víctima de un abusador. Publicitar y visualizar el problema reduce los ataques velados.
  • Guarda tus cosas de valor bajo llave cuando estés en la oficina o deja las más importantes en casa. Así evitas que el acosador robe o dañe tus pertenencias.
  • No dejes que te aíslen socialmente y pide asesoría legal o psicológica para enfrentar el problema.

El mobbing puede ser muy perjudicial para tu bienestar, pero es importante saber reconocerlo y combatirlo.

¿Le resultó útil este artículo?
Artículos Relacionados
Dany Fernandez