Lo que esconden los huevos manchados o con fisuras
No importa si los prefieres revueltos, duros o fritos, los huevos son un alimento clásico de la cocina internacional. No solo tienen un sabor espectacular, sino que también forman parte de una dieta rica y saludable. El consumo de huevos ayuda a reducir el colesterol, disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardíacas y proporciona proteínas de calidad al tiempo que es bajo en calorías. Sin embargo, algunos huevos con cáscaras manchadas o con fisuras no parecen tan apetecibles.
¿Qué pasa con los huevos manchados?
Es posible que hayas observado que algunos huevos tienen pequeñas manchas marrones en la cáscara. Se llaman huevos manchados. Estas pequeñas manchas oscuras se crean en las primeras etapas de la formación del huevo, a medida que éste se desplaza por la gallina. Cuando el huevo pasa por el oviducto, el órgano que procesa la yema y añade la cáscara, gira. Si el huevo gira muy despacio mientras baja por el tubo, se forman pequeñas manchas marrones en la cáscara.
Probablemente puedas notar uno o dos huevos con bultos en el cartón cuando regrese del supermercado. La protuberancia significa simplemente que la cáscara tiene una textura particular, en lugar de ser completamente lisa. También hay casos en los que quedan restos del tubo mientras se forma la cáscara. Los restos en el oviducto son más comunes en las gallinas viejas o en las gallinas jóvenes que no está recibiendo los nutrientes suficientes. El calcio se libera y arrastra los restos hacia la cáscara.
Entonces ¿Es seguro comer huevos manchados o con fisuras?
La respuesta es sí, no hace falta descartar los huevos cuando se observan estas pequeñas anomalías. La precaución más importante que debes tener en cuenta es que antes de comer un huevo debes decidir la forma de cocinarlo. La salmonela es un grupo de bacterias responsable de causar intoxicación alimentaria, por lo que esto no debe tomarse a la ligera. Aunque no siempre se trata de la salmonela, comprueba si hay manchas verdes o negras en el interior de la cáscara, esta es una señal de la presencia de bacterias o contaminación.
Te recomendamos guardar bien los huevos dentro del frigorífico y usarlos dentro de las tres semanas siguientes a su compra para aprovecharlos mientras aún se encuentran frescos. Aunque no veas manchas en el interior de la cáscara después de romperla, es importante que el alimento se mantenga limpio. Si tocas un huevo crudo mientras lo cocinas, lava bien tus manos, los utensilios y cualquier otra superficie que haya estado en contacto con el huevo crudo. Además, asegúrate de cocinar los huevos hasta que las yemas estén bien cocidas.
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