¿Es necesario lavar el pollo antes de cocinarlo? La respuesta te va a sorprender
Según varias investigaciones científicas, la mayoría de la población tiene la costumbre de lavar el pollo antes de cocinarlo. Los orígenes de este mal hábito no están muy claros, pero creemos que todos hemos visto al menos una vez lavar el pollo justo en el fregadero, pero las investigaciones científicas son claras al sugerir que esta práctica podría ser muy perjudicial para la salud. Veamos cuáles son los motivos que señalan a esta práctica como riesgosa para el bienestar de las personas.
Estos son los motivos por los que nunca deberías lavar el pollo antes de cocinarlo
En esta investigación, un grupo de científicos británicos ha querido crear conciencia sobre este tipo de riesgos imperceptibles pero recurrentes en el hogar. Este estudio salió en respuesta a los millones de personas de todo el mundo que lavan el pollo antes de cocinarlo, así que ellos buscaron exponer toda una serie de razones por las que no debe hacerse para evitar contraer enfermedades.
El pollo crudo puede ser portador de una serie de bacterias que podrían ser perjudiciales si llegan a entrar en contacto con los humanos, y la única forma de «matar» estas bacterias es por medio del calor.
Teniendo esto en cuenta, cuando se lava el pollo bajo el chorro de agua, nos estamos exponiendo a contaminar muchos utensilios e incluso el mismo fregadero, tus manos, y muchas otras áreas más con las bacterias que están incrustadas en la carne. Si las bacterias se trasladan del pollo a otras zonas o alimentos, el riesgo de contaminación y proliferación es realmente alto.
Una de las consecuencias más comunes y conocidas es la salmonelosis, una forma de intoxicación alimentaria que, en los casos más graves, puede requerir de hospitalización. Otra enfermedad que se diagnostica por este tipo de casos es la Campilobacteriosis.
Esta es una enfermedad que se manifiesta con síntomas como fiebre, diarrea y náuseas, pero si no es tratada a tiempo puede causar síntomas mucho peores que llegan a requerir de hospitalización. Por lo tanto y conociendo todos estos riesgos, es mejor coger el pollo y cocinarlo directamente, sin tener que lavarlo o mojarlo previamente. Para evitar estos riesgos te recomendamos poner la carne en contacto directo con una fuente de calor. Según un gran número de estudios y expertos, también debe evitarse usar tablas para picar o platos para colocar el pollo crudo, es mejor pedirlo ya partido en el supermercado o la carnicería donde vayamos a comprarlo, ya que las bacterias pueden quedarse pegadas a cualquier superficie.
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