¿Cuánta sal debo consumir al día?
La sal es un nutriente importante para la salud, sin embargo, consumirla en exceso o eliminarla de la dieta puede provocar problemas en tu cuerpo

A pesar de que su consumo es considerado como necesario para el correcto funcionamiento del organismo, la sal consumida en exceso es una de las principales causas de enfermedades como la hipertensión arterial. Reducir el uso de sal en la cocina ayuda a mantener bajo control el desarrollo de un gran número de enfermedades complicadas.
¿Crees que es posible reemplazar la sal al momento de condimentar nuestros alimentos? Seguramente estés pensando que es algo imposible, pero es una opción a la que deberíamos ir acostumbrándonos poco a poco para mantenernos saludables. De hecho, el uso de altas dosis de sal en los platos daña las arterias y es una de las causas de la aparición de algunas enfermedades importantes como la hipertensión. En los últimos meses, un estudio médico publicado por la Universidad Queen Mary de Londres intervino sobre este tema.
El estudio científico dice que la sal en la comida, cuando se consumen en exceso, aumenta el riesgo de dañar las arterias
Este estudio científico reciente, realizado por la Universidad Queen Mary en Londres, confirmó lo que los médicos han estado diciendo durante tantos años, que el consumo excesivo de sal en la cocina provoca un aumento en la probabilidad de desarrollar problemas severos de salud. Por el contrario, reducir los niveles de sal podría tener un efecto crucial en el control de los riesgos para la aparición de enfermedades cardiovasculares. Viendo todo esto, sin duda se trata de una elección que no solo afectaría la enfermedad y a la salud, sino que también tendría efectos significativos al beneficiar el ahorro estatal en la salud de las naciones.
Los investigadores señalaron que en los últimos 15 años el consumo de sal se ha reducido en un 15% y se estima que para el 2050 la baja en el consumo de sal hará que al menos unos 193.870 adultos hayan evitado el desarrollo de varias enfermedades cardiovasculares prematuras, lo que se traduce en un costo total de 1.640 millones ahorrados en gastos.
Un cambio de hábitos en el que todos deberíamos estar involucrados
Es una lástima, pero es imposible combatir al exceso de sal únicamente desde la cocina de nuestro hogar. Esto es así porque hay muchos alimentos en el mercado que ya vienen precocinados o envasados con altas dosis de sal, los cuales utilizamos casi a diario. Según lo señalado por los expertos de la Universidad Queen Mary, es importante que los usuarios comencemos a obligar a las industrias a cooperar en la producción de alimentos que sean más saludables y aptos para todos los consumidores. Graham MacGregor, profesor de enfermedades cardiovasculares de la misma universidad, expresó su opinión acerca del informe entregado por el estudio diciendo que: «Es cuanto menos apropiado que los gobiernos comiencen a adoptar medidas restrictivas para obligar a la industria alimentaria y a las empresas productoras a contribuir a la distribución de productos con menores cantidades de sal añadida».