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Estilo de vida

Conozca los hábitos que desarrolla una persona con ansiedad

Las personas en estado de ansiedad muy probablemente no miran a los ojos pues temen a que sepan lo que realmente les pasa

¿Sabías que las personas con ansiedad desarrollan hábitos específicos?, a continuación te compartimos algunos de ellos que pueden ser significativos para las personas que sufren de este estado mental.

Se disculpan por todo

Las personas con ansiedad tienen la sensación de constantemente incomodar a los demás o por el contrario deben satisfacer las necesidades a diario, por esta razón uno de sus hábitos es disculparse por cualquier acción. Algunos especialistas en el tema aseguran que esto es incontrolable.

No miras a los ojos

Las personas en estado de ansiedad muy probablemente no miran a los ojos pues temen a que sepan lo que realmente les pasa.

Las personas ansiosas evitan mirar a su interlocutor para estar pendiente de su alrededor y buscar de esta manera una forma de escapar de la situación que le está creando la ansiedad.

Tardan mucho tiempo en tomar decisiones

Las personas con ansiedad tienden a analizar las situaciones hasta el más mínimo detalle, lo que hace casi imposible que tomen una decisión, incluso si se trata de una decisión simple, como por ejemplo que ponerse ese día o que comer. Este “habito” no solo puede afectar a estas personas, puede afectarlos en sus trabajos, en su pareja o con sus hijos.

Las personas con ansiedad aprietan los dientes

El estrés al que están sometidas las personas ansiosas puede traer consigo problemas de salud, esto puede verse reflejado en el cuerpo como hábitos inusuales por ejemplo; apretar los dientes en la noche con demasiada fuerza.

Esta mezcla de situaciones y hábitos pueden ser peligrosos e incluso parecer raro o descortés, haciendo más difícil  la vida de las personas que padecen esta enfermedad.

Los trastornos de ansiedad son afecciones en las que la  enfermedad no desaparece y puede empeorar con el  paso de los tiempos y la gravedad del trastorno.

Los síntomas pueden interferir con las actividades cotidianas, como el desempeño en el trabajo, la escuela y las relaciones interpersonales.

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