Alimentos que nunca deberías mezclar con café según los nutricionistas
Es importante prestar atención a cómo tu cuerpo reacciona ante estas combinaciones.
El café es una de las bebidas más populares del mundo, pero no todos los alimentos se llevan bien con él. Aunque a simple vista pueda parecer irrelevante, las combinaciones de café con ciertos alimentos pueden afectar tu digestión, reducir la absorción de nutrientes o incluso causarte molestias estomacales.
Alimentos ricos en hierro
Si estás cuidando tus niveles de hierro o tomas suplementos, evita combinar estos alimentos con café. La cafeína puede reducir la capacidad del cuerpo de absorber hierro hasta en un 80%. Esto aplica particularmente a alimentos como las espinacas, lentejas y carnes rojas. La razón es que esta bebida negra contiene taninos, compuestos que interfieren directamente con la absorción de este mineral esencial.
Si disfrutas de un desayuno con pan integral o huevos, espera al menos una hora después de tomar café para consumirlos. Darle tiempo a tu cuerpo ayudará a maximizar la absorción de nutrientes importantes.
Lácteos: Una doble espada
Aunque muchos lo prefieren con leche, los nutricionistas advierten que no todos los lácteos combinan bien con esta bebida. La caseína, una proteína presente en la leche, puede unirse a los antioxidantes del café y reducir sus beneficios para la salud. Además, si eres intolerante a la lactosa, esta mezcla puede causar molestias digestivas como hinchazón o gases.
Por otro lado, los alimentos altos en calcio también pueden sufrir los efectos antagonistas del café, ya que la cafeína puede interferir con la absorción de este mineral.
Cítricos y jugos ácidos
¿Alguna vez has tomado un jugo de naranja junto con tu café? Tal vez deberías pensarlo dos veces. Los cítricos y el café tienen un impacto en la acidez estomacal. Ambos pueden aumentar los niveles de ácido en el estómago, causando molestias como reflujo o indigestión. Mezclar café con frutas ácidas puede ser una receta para el malestar gástrico.
Si prefieres comenzar el día con café y jugo, lo ideal es consumirlos por separado, dejando que tu sistema digestivo se estabilice.
Comidas altas en azúcar
Galletas, donas o cualquier dulce es una combinación clásica con café, pero también una de las peores para tu cuerpo. Consumir alimentos ricos en azúcar junto con la cafeína genera picos de glucosa que pueden provocar fatiga después de unas horas. Además, este hábito puede contribuir al desarrollo de problemas como la diabetes con el tiempo.
En lugar de un snack alto en azúcar, opta por almendras sin sal o algún fruto seco. Son opciones que equilibrarán mejor los niveles de energía durante el día.
Alimentos grasosos y fritos
El café puede aumentar la motilidad del estómago, lo que significa que los alimentos grasosos se digerirán más rápido de lo normal. Este proceso puede causar pesadez estomacal o, en casos extremos, diarrea. Esto aplica a alimentos como los huevos fritos, bacon y productos de pastelería con alto contenido en grasas saturadas.
Si no puedes resistirte a este tipo de desayunos, acompáñalos con agua en lugar de café. Esto le dará a tu cuerpo la oportunidad de procesar adecuadamente las grasas.
Especias picantes
Aunque raro, algunas personas combinan platos picantes con café en ciertos desayunos internacionales o postres especiados. Esta combinación puede irritar el estómago y agravar problemas como gastritis. Además, el café ya de por sí estimula la secreción ácida, por lo que juntar ambas cosas podría llevarte directamente al malestar.
Lo mejor es disfrutar las especias picantes en otro momento del día, dejando esta bebida para acompañar algo más neutro.
Si no quieres renunciar a tu bebida mañanera pero quieres cuidar tu salud, solo es cuestión de elegir acompañamientos que no afecten tu bienestar. Un simple cambio en tu rutina puede marcar una gran diferencia. Así que ya sabes, la próxima vez que prepares tu taza, piensa en lo que eliges acompañarla. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!
